Cuando me anunciaron que ya no iba a seguir trabajando ahí en la empresa y mi jefe me dijo que los diseñadores tenían problemas de disciplina, sugirió que la mejor forma de arreglar esto era que al finalizar mi contrato yo siguiera trabajando con ellos como diseñador externo, porque consideraban muy bueno mi trabajo y no les parecía justo que yo siguiera en un trabajo donde no me garantizaban una vacante permanente.
"Sí, claro" les dije. Aunque ya mi mente volaba y se preparaba para llorar.
Mi contrato finalizaba en 5 días. Y supongo que se dieron cuenta que era muy abrupto el aviso así que me extendieron el contrato por 15 días más o que si lo prefería podía terminar mi trabajo el día en que estaba el contrato anterior.
"No, está bien. Me quedo quince días más." La verdad no quería quedarme un día más, pero consideré que esa quincena extra me sería útil y acepté.
Para que yo pudiera trabajar como externo para ellos era necesario que me registrara en hacienda (en el fisco, pues) para poder entregar recibos y pagar impuestos y trabajar por honorarios. Me pidieron que investigara y que me registrara lo antes posible para que así me pudieran asignar proyectos en los que ganaría más de lo que me pagaban como empleado.
"Claro, yo investigo y les aviso." Repetí mecanicamente porque la verdad no me interesaba trabajar de ese modo; tiene sus ventajas, sí, pero también inconvenientes, y yo no quería los inconvenientes relativos a la falta de seguro social y prestaciones.
Además, para que yo trabajara con ellos debía aprender a usar un software que ahí utilizan mucho para hacer e-learnings. Porque, supuestamente, tendrían muchos proyectos en lo sucesivo y necesitaban que fueran en esa plataforma. Claro, ahora resulta que me voy y tendrán muchos proyectos. Bullshit. El inconveniente de trabajar con ese software es que cuesta $30 000 pesos, y no es pirateable porque casi nadie lo utiliza, y yo solo, trabajando por honorarios, no puedo gastar en algo así. Lo cual ya hacía imposible que yo pudiera trabajar como proveedor externo.
Mis últimos 15 días ahí fueron, curiosamente, de mucho trabajo. Me pidieron que hiciera cambios en algunos proyectos antes de que me fuera, para aprovechar mis últimos días. Me dieron un proyecto de una aplicación para una tablet android que debía terminar en estos 15 días. Todo lo hice bien y sin protestar.
En días posteriores hubo una comida de despedida, inicialmente la comida fue para festejar que una de las becarias se iba a otro puesto, ya de tiempo completo, en otra área de ahí de la empresa. Era una comida de despedida para ella, para desearle buena suerte, y por supuesto le preguntaron qué quería comer y qué día le parecía bien. Ya planeado todo, 2 días antes de celebrarse la comida, empezaron a agregar que la comida también era para mí, que era mi despedida y mi deseo de buena suerte; claro, a mí no me preguntaron qué quería comer y si iba a poder ir ese día a esa hora. Total que le fueron agregando títulos a la fiesta y terminó siendo una fiesta de despedida doble y de bienvenida doble, pues ahora también festejábamos la llegada (desde hace un mes) de dos chicas.Fuese como fuese, no quería ir, era ridículo hacer una comida de despedida cuando te despiden, pero pues fui nomás por desearle suerte a la chica que sí logró tener su vacante.
Días pasaron, mi "jefe" me preguntó cómo iba el registro con hacienda y que si pensaba aliarme con alguien para hacer los proyectos (casi sugiriendo que formara una empresa). Le dijo que aún no me registraba y que la verdad no me entusiasmaba mucho trabajar como externo, además, le manifesté que era medio imposible conseguir el programa que me pedía. A lo que él respondió que no me preocupara, que con lo que me pagarían por un proyecto bastaba y sobraba para cubrir lo del software, es más, que lo de un proyecto es más de lo que ganaría en un año.
"Sí, me voy a poner a investigar del software. A ver si lo consigo en pirata." le dije, para que me dejara en paz.
En los últimos días que estuve, el jefe del área, quien era directamente responsable de mí, por fin me llamó para hablarme en persona sobre mi "fin de contrato". Al menos me lo dijo en persona, si no lo hubiera hecho ni siquiera me hubiera despedido de él el último día.
Mi último día de trabajo allí me hicieron un pastel.¿Un pastel de despido? Sí, me pareció un insulto, pero pues qué podía hacer, no podía negarme. Eeem, llegamos, partimos el pastel, me desearon suerte, lo cual agradezco de las personas que me lo dijeron sinceramente
Entre tanto, llegó un compañero de otra área, y lo invitaron al pastel, él preguntó el motivo del festejo y todos dijeron que era para celebrar mi despedida y desearme suerte, a lo que él cortesmente preguntó:
Entre tanto, llegó un compañero de otra área, y lo invitaron al pastel, él preguntó el motivo del festejo y todos dijeron que era para celebrar mi despedida y desearme suerte, a lo que él cortesmente preguntó:
"Ah, qué bien y ¿Adónde te vas?" dijo, como para saber a qué otra empresa me iba. Y yo disfruté la malignidad de responder a mi modo la pregunta.
"Pues de momento... me voy a mi casa." dije sonriendo. Hubo risas incómodas, ciertamente."Mmmmm, yo no celebro que hagan un pastel por ese motivo." contestó amable, pero incomodamente.
Luego de esto mi "jefe" intervino diciendo que no, que esto era porque yo iba a trabajar como proveedor externo y que iba a seguir colaborando con el área y bla bla bla bla bla... quiso componerle pa quedar bien. Bullshit.
Fue mi último día. Me despedí de quien estaba a la hora de mi salida y me fui... me fui... me fui.
Me dijeron que me llevara lo que quedaba del pastel, pero me fui, quién quiere un estúpido pastel de despido.
P.D. Sí, estoy todo amargado por esto. Pero aún no termino. Tal vez cuando acabe de contar todo ya pueda superarlo.
3 comentarios:
Animo, así pasa, mucho exito en lo que venga (ya sé que suena trillado, pero es sincero)
Justo ayer le explicaba a un chaval como es eso de los honorarios, te conviene darte de alta ahora que tienes tiempo, nunca está de más, aunque no te recomiendo que hagas recibos de una vez, luego te venden de a 100 o 200 y expiran pronto)
Lo superarás cuando encuentres un trabajo con compañeros y jefes que si saben valorar tus esfuerzos ;)
Ánimos!
Le hubieras metido la torta en el 'orto' (culo) y se la hacías vomitar! Pero no te calentés, no sé como andará el mercado laboral en México, pero cuando una puerta se cierra, siempre hay otra puerta q se abre...
Te lo digo yo, q en esto de trabajos y a los 22 años, todavía ando como un saltibanqui (de acá para allá) sin poder establecerme en ningún lado...
Ánimo y besos!
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